Correlación verbal

Esta secuencia fue tomada del libro Evaluar… Enseñar… Evaluar… Prácticas del Lenguaje en Segundo Ciclo de la escuela primaria.

  • En primer lugar, se presenta un párrafo escrito en presente y se solicita a los niños que lo reescriban en pasado.

    Abro la puerta y salgo a la calle. Es un día radiante. Me encuentro con mi vecina, Doña Catalina, que se siente mal porque su gato está enfermo.

    El reemplazo correcto sería el siguiente:

    Abrí la puerta y salí a la calle. Era un día radiante. Me encontré con mi vecina, Doña Catalina, que se sentía mal porque su gato estaba enfermo.

    Al finalizar, el docente hace una puesta en común de los reemplazos realizados por los niños y se procede a la siguiente sistematización.

    Pretérito perfecto simple Pretérito imperfecto
    abrí
    salí
    encontré
    era
    sentía
    estaba

  • En un segundo momento, se plantea otro texto escrito en presente, pero en este caso el último verbo está en pretérito perfecto simple.

    Cuenta la leyenda que en lo más secreto del bosque existe una casa embrujada de la que salen gritos y aullidos aterradores. Nadie se anima a acercarse a ella. Dispuestos a desentrañar su misterio, Isidro y Estanislao organizan una expedición. Buscan una linterna y deciden llevar unos palos para defenderse y una rica torta que preparó su mamá el día anterior.

    La reposición correcta es:

    Cuenta la leyenda que en lo más secreto del bosque existía una casa embrujada de la que salían gritos y aullidos aterradores. Nadie se animaba a acercarse a ella. Dispuestos a desentrañar su misterio, Isidro y Estanislao organizaron una expedición. Buscaron una linterna y decidieron llevar unos palos para defenderse y una rica torta que había preparado su mamá el día anterior.

    Después de la puesta en común de los reemplazos realizados por los niños, se elabora un cuadro con la sistematización correspondiente:

    Pretérito perfecto simple Pretérito imperfecto Pretérito pluscuamperfecto
    organizaron
    buscaron
    decidieron
    existía
    salían
    animaba a acercarse
    había preparado
  • En tercer término, se presenta un texto en el que todos los verbos están en infinitivo, equivalente al que aparece en la “Hoja del alumno” de la correspondiente actividad para relevar los aprendizajes que aparece en las Progresiones. Los alumnos deben reemplazarlos por las formas conjugadas correctamente.

Como puede advertirse, en esta secuencia se seleccionaron tres tipos de pretérito. Esta decisión se vincula con el hecho de que estos son los tiempos predominantes en la narración:

  • El pretérito perfecto es usado cuando algo se produjo en el pasado y ha terminado (“Colón descubrió América en 1492.”);

  • El pretérito imperfecto implica duración o reiteración (“El mar estaba embravecido y las olas golpeaban las embarcaciones una y otra vez.”);

  • El pretérito pluscuamperfecto se utiliza cuando se refiere a un hecho que ocurrió con anterioridad a lo que se está narrando en pasado (“Colón pagó los gastos de la expedición con las joyas que le había dado la reina Isabel de Castilla.”).
Esta actividad fue extraída de los materiales del proyecto Escuelas del Bicentenario.


En primer lugar, se incluyen las consignas para el alumno y, después, las sugerencias para el docente.

Consignas para el alumno

Leé estos fragmentos de cuentos conocidos:

En tiempos remotos, hijo mío, el elefante no tenía trompa. Solo poseía una nariz oscura y curvada, del tamaño de una bota, que podía mover de un lado a otro pero con la que no podía agarrar nada. Existía, también, otro elefante, un nuevo elefante, hijo del anterior, que tenía una insaciable curiosidad por todas las cosas, lo que significaba que, en todo momento, estaba haciendo preguntas. Vivía en África y a todos molestaba con su insaciable curiosidad.

Fragmento de El hijo del elefante, de Rudyard Kipling.



Los flamencos, llenos de miedo porque estaban descubiertos, quisieron volar; pero estaban tan cansados que no pudieron levantar una sola pata. Entonces las víboras de coral se lanzaron sobre ellos, y enroscándose en sus patas les deshicieron a mordiscones las medias. Les arrancaron las medias a pedazos, enfurecidas y les mordían también las patas, para que murieran.

Fragmento de Las medias de los flamencos, de Horacio Quiroga.



Sherezade era una joven de delicadeza exquisita. Contaban en la ciudad que había leído innumerables libros y conocía las crónicas y las leyendas de los reyes antiguos y las historias de épocas remotas. Sherezade guardaba en su memoria relatos de poetas, de reyes y de sabios; era inteligente, prudente y astuta. Era muy elocuente y daba gusto oírla.

Fragmento de Las mil y una noches.



Aquella primera noche, Sherezade empezó con la historia del mercader que, en uno de sus viajes por el desierto, cayó en manos de un efrit que quería cortarle la cabeza. El mercader, en su afán por salvar su vida, le contaba al genio maligno tantos relatos maravillosos que llegó el amanecer sin que Sherezade hubiese concluido la historia. Entonces, la joven se calló discretamente, sin aprovecharse más del permiso que le había concedido Shariar. Su hermana Doniazada dijo:
–¡Oh hermana mía! ¡Cuán dulces y sabrosos son tus relatos!
Sherezade contestó:
–Pues nada son comparados con los que os podría contar la noche próxima, si el rey quiere conservar mi vida.
El rey dijo para sí:
–¡Por Alá! No la mataré hasta que haya oído el final de su historia.
Y por primera vez en muchos años durmió un sueño tranquilo.

Fragmento de Las mil y una noches.

  1. Anotá en qué textos se presenta a los personajes y en cuáles se cuentan lo que hacen.
  2. Anotá con qué verbos se presenta a los personajes.
  3. Anotá algunos de los verbos con los que se cuenta qué hacen los personajes.
Sugerencias para el docente
Recupere en dos listados los verbos que señalaron los alumnos; vaya poniendo en una columna los que están en pretérito perfecto simple y, en otra, los que están en pretérito imperfecto. Por otro lado, sueltos, los que están en presente y en futuro (por ejemplo, los que corresponden a los diálogos del fragmento de Las mil y una noches).

Retome con los niños que existen diferencias entre los pasados y discuta con ellos cuáles podrían ser esas diferencias a partir de estos listados y cómo están usados en los cuentos. Es importante ayudar a los alumnos a advertir que el pretérito perfecto simple se usa para señalar las acciones puntuales de los personajes (aquellas acciones que empiezan y terminan: se lanzaron sobre ellos; empezó con la historia), mientras que el pretérito imperfecto se usa para presentar características de los personajes, para describir, para explicar el contexto de esas acciones, para señalar acciones habituales o que se repiten y duran en el tiempo (no tenía trompa; guardaba en su memoria). Si advierten estas diferencias, proponga a los niños buscar en otros cuentos o biografías que hayan leído si se cumple esta condición.

Luego, podrán registrar las conclusiones en el apartado de Reflexión sobre el Lenguaje de la carpeta, con ejemplos de los cuentos.